"¿Quién sostiene a las autoridades en el poder? Son ellos con sus sucias artimañas o somos nosotros con nuestra pobre ignorancia..."
Para no creer lo que sucede en nuestra querida y maltratada casa de estudios. Esto cada día más se parece a una chacra con patrón, capataz y siervos subordinados hasta la médula, salvo excepciones; si nos ponemos a recordar cuantos han sido los días en que hemos llegado a la UNFV y hemos encontrado los locales cerrados nos sorprenderemos.
Las “razones” de cierre de local varían y cada uno violenta en mayor grado la inteligencia de estudiantes, docentes y administrativos. En mayo cerraron los locales porque para el rector y sus acólitos había peligro de tomas por la suspensión de elecciones, meses después los alumnos del turno mañana nos encontramos una hoja A4 en la puerta informando que se suspendían las labores por ese día porque iban a hacer un “HOMENAJE AL ADULTO MAYOR”, y ¿Quién lo ordeno? La mismísima Ministra de la Mujer, de esos tiempos, Nidia Vílchez. Se suspendió por 4 días en la última suspensión de las elecciones de octubre y si no hubiera estado cerrado el local central esos días igual lo hubieran cerrado para que le prendan un par de velas al Señor de los Milagros, como lo hacen todos los años. La última “razón” de cierre dicen que es por la FUMIGACIÓN. ¿Fumigación? ¿Y cuando detectaron la plaga que estaba invadiendo a todos los locales de la universidad? Que tal insulto al raciocinio de los villarrealinos. Vergüenza es lo que deberían tener esas personas porque no les da la cabeza más que para pensar en lo grueso que quieren que estén sus billeteras para fin de año.
Pero cada cierre de local esconde cuestiones de fondo y este último cierre no es la excepción, parece ser los últimos manotazos de ahogados del rector y su gente, ante la inevitable intervención de la universidad.
Nosotros manifestamos nuestro total rechazo a la violación de la autonomía universitaria, pero tampoco seremos tontos útiles. Hoy por hoy en la universidad la autonomía ha sido deformada monstruosamente y algunos sólo lo utilizan como cliché para defender sus turbios intereses.
Porque no defienden de la misma forma, docentes y alumnos, el derecho a recibir una educación de calidad, cosa que se ha perdido hace mucho; porque no exigen con la misma firmeza con la que hoy exigen elecciones, servicios básicos como alimentación, transporte, salud, etc. O lo que no cuesta ni un sol pero si mucha convicción, por que no exigen la DEMOCRATIZACIÓN DE LA UNIVERSIDAD.
Lamentamos profundamente que la situación de la universidad se agrave cada vez más y muchos se mantengan al margen. ¿Nos perjudica académicamente estos problemas? Claro que sí, y si no hacemos nada esto seguirá reproduciéndose año tras año. Es hora de repensar nuestro rol en la universidad. O venimos a calentar los asientos de nuestras aulas durante cinco años, o a ser solamente “académicos” o a aprender a ser ciudadanos y ejercer y hacer respetar nuestros derechos de manera consecuente (Y para los que necesitan detalles para entender: el recibir educación de calidad, servicios básicos, libertades políticas y trabajo digno son derechos fundamentales que nos pertenecen por ley). Cada quién debe de tomar su decisión previa autoevaluación personal.
CIQANTU-UNFV
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